Cree en ti mismo, esa es la clave para una vida plena en la que puedes además ayudar a otros con tus talentos y vivir tu propósito vital.
Y es que ayer se celebró el sorteo de lotería de Navidad. Al 22 de diciembre se le llama el día de la salud porque si no nos toca ningún premio económico, buscamos consuelo en que tenemos salud. Y es que sabemos, que efectivamente, nadie cambiaría su salud por todo el oro del mundo. La salud es el mejor premio, el 22 y cualquier otro día.
También hay otro premio y lo bueno que tiene es que no depende del azar de unos números. Depende de ti: cree en ti mismo. Ese es el premio que te puedes regalar.
¿Crees en ti? Yo sí porque sé que todos tenemos talentos y por ello siempre apuesto por las personas. Hay veces que tenemos que hacer un esfuerzo consciente de mirar hacia dentro y ver qué hay en nosotros que vale la pena. Ese talento que nos hace únicos, con el que podemos contribuir a un mundo más feliz.
Algunos talentos son muy evidentes como pintar bien, tocar algún instrumento musical, hablar idiomas, etc. ¡Quién supiera hacer esas cosas! 🙂
Pero es que hay otros talentos más sutiles que se nos pueden escapar y que son los que marcan una diferencia sin casi darnos cuenta de lo que hacemos. Hay personas que dan su apoyo a otras son su sonrisa, con un consejo, escuchando. Otras personas son capaces de movilizar a otras para lograr cambios o mejoras de las que otros nos beneficiamos. Son habilidades interpersonales que hacen que otros se sientan mejor consigo mismos.
¿Cómo se transforman estas habilidades innatas en un talento que mejore tu vida, que te ayude en tu propósito vital?
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Porque sí, porque creo en ti. ¿Y tú?
¡Cree en ti mismo!